En 1973 el famoso director italiano Franco Zeffirelli, realizó una cinta cinematográfica sobre San Francisco de Asís, patrono de esa localidad de Italia, (1181-1226). Titulada Hermano Sol, Hermana Luna, se ha convertido en una de las obras más emblemáticas del director.

Por lo general, las películas más famosas siempre están protagonizadas por estrellas famosas pero el reparto de esta cinta estuvo integrado por artistas poco conocidos. Esto no fue impedimento porque supieron darle el toque necesario a cada uno de sus personajes.
En el papel de San Francisco de Asís se destaca el actor Graham Faulkner, quien junto a Judi Bowker, Kenneth Cranham, Leigh Lawson. Entre otros convierten a Hermano Sol, Hermana Luna, una referencia en los filmes del género religioso
Hermano Sol, Hermana Luna, fue tan exitosa que estuvo nominada al Oscar en la categoría de mejor dirección artística y a los premios Bafta como Mejor diseño de vestuario.
Hermano Sol, Hermana Luna: una exaltación a la humildad
La cinta de Zeffirelli, destaca la revelación que tuvo Francisco de parte de Dios y que lo hizo cambiar el rumbo de su vida para servirle. Hijo de Pedro Bernardone, un rico comerciante de telas en Asís, Francisco regresa de la guerra muy enfermo y con una gran crisis física y emocional al poder ver de cerca el sufrimiento y la pobreza de los menos afortunados.
Cuando se recupera de su enfermedad, experimenta un gran cambio y deja de ser el joven adinerado y superficial que era, para convertirse en una persona totalmente diferente.
Por lo tanto cambia su vida lujosa y despreocupada, por la humildad y el desapego por los bienes materiales, para lograr su propósito de predicar el amor por Dios y toda su creación. Su padre no entiende la decisión de Francisco de no querer hacerse cargo del negocio familiar y completamente frustrado lo lleva ante el obispo y lo humilla públicamente.
En la película Hermano Sol, Hermana Luna, San Francisco de Asís te proporcionará un hermoso mensaje de desprendimiento de los bienes materiales, al renunciar a toda clase de posesiones, para vivir disfrutando de una vida sencilla en los caminos de Dios.
Comienza su trabajo en la iglesia de San Damián, la cual repara con la ayuda de un grupo de amigos y de la joven Clara, ante las críticas de quienes lo conocen y la admiración del obispo quien lo apoya en su obra misericordiosa.
En la cinta Hermano Sol, Hermana Luna, un cardenal le manifiesta a un obispo, que el Papa sabe lo que está haciendo con San Francisco, ya que estaba trayendo a los pobres a la iglesia. Y en verdad, San Francisco recibió un gran apoyo de parte del Vaticano, que le permitió crear la Orden de los Franciscanos en 1209, por medio de la cual con un voto de pobreza renunciaban a toda riqueza colectiva o individual. También creó la Orden de las hermanas Clarisas, en honor a su amiga Clara, quien cuidaba a los leprosos, dejando para la iglesia católica un gran legado de humildad y devoción a Dios y amor a los pobres y necesitados.